Recibir una carta invitación del SAT es, para muchos empresarios y emprendedores, un momento de incertidumbre: ¿es solo un recordatorio cordial o una amenaza encubierta? Aunque estas comunicaciones no son auditorías formales, sí representan un primer paso que puede escalar rápidamente a revisiones más invasivas si no se atienden con seriedad.
Son comunicaciones preventivas que el SAT envía a los contribuyentes cuando detecta discrepancias en CFDI, declaraciones, depósitos bancarios o información de terceros.
En México, estas prácticas se consolidaron con la fiscalización electrónica y el uso obligatorio del CFDI, la contabilidad electrónica y el Buzón Tributario.
Aunque llegan con tono amigable, en realidad son un aviso de que el SAT ya tiene información sobre posibles omisiones.
Qué hacer:
Las cartas invitación del SAT deben entenderse como lo que son: una advertencia formal disfrazada de cortesía. Atenderlas de manera estratégica puede significar el cierre de un tema con bajo costo; ignorarlas o responder mal puede ser la antesala de multas millonarias, auditorías agresivas y problemas legales.
La clave está en reaccionar con calma, asesoría experta y documentación sólida. Recuerda: en materia fiscal, la prevención no es un gasto, es una inversión. En AS Consulting Group ayudamos a empresas y emprendedores a responder de manera efectiva a estas cartas, protegiendo su patrimonio y manteniendo la tranquilidad operativa. Contáctanos en www.ascg.mx