En México, la autoridad fiscal cuenta con diversas facultades para asegurar que los contribuyentes cumplen adecuadamente con sus obligaciones fiscales. Este cumplimiento no solo debe ser puntual, sino también conforme a las disposiciones legales aplicables.
El Código Fiscal de la Federación (CFF), en su artículo 42, establece las facultades de la autoridad fiscal para verificar el cumplimiento de las obligaciones fiscales, determinar contribuciones omitidas, créditos fiscales, imponer multas por infracciones y comprobar posibles delitos fiscales. Estas facultades incluyen:
Las facultades de la autoridad fiscal están sujetas a plazos para evitar violaciones a los principios de certeza y seguridad jurídicas, así como al principio de legalidad previstos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Esto se asegura mediante las figuras de prescripción y caducidad.
Prescripción: Según el artículo 146 del CFF, el crédito fiscal se extingue por prescripción en un término de cinco años. El plazo se interrumpe con cada gestión de cobro notificada al deudor y no puede exceder de diez años.
Caducidad: El artículo 67 del CFF establece que las facultades de la autoridad se extinguen en cinco años para determinar contribuciones omitidas y en diez años si el contribuyente no ha presentado su solicitud en el Registro Federal de Contribuyentes, no lleva contabilidad o no presenta declaraciones obligatorias.
Caducidad: Se actualiza cuando la autoridad no ejerce sus facultades en el tiempo previsto, sin interrupciones, aunque puede suspenderse en ciertos casos.
Prescripción: Se actualiza cuando la autoridad, habiendo ejercido sus facultades y determinado un crédito fiscal, no realiza gestiones para su cobro. Este plazo puede interrumpirse y suspenderse, pero no puede exceder de diez años.
Empresarios y emprendedores deben estar atentos al cumplimiento de sus obligaciones fiscales para evitar sanciones y asegurar la estabilidad de sus negocios. Conocer las facultades de la autoridad fiscal y las figuras de prescripción y caducidad es fundamental para garantizar un manejo adecuado de sus responsabilidades fiscales y proteger sus derechos.