El repliegue de la moneda ocurría en momentos en que el dólar recuperaba algo de terreno ante una cesta de divisas internacionales.
El peso mexicano se depreciaba el viernes tras una racha de cinco jornadas de ganancias que lo llevaron a tocar en la víspera su mejor nivel en más de un año en medio de crecientes expectativas de que la Reserva Federal (Fed) comenzará a recortar las tasas de interés la próxima semana.
La moneda cotiza en 18.48 unidades, con un retroceso de 0.25% frente al precio de referencia de LSEG del jueves, cuando llegó a fortalecerse hasta 18.43 unidades, un nivel no visto desde agosto de 2024.
La cotización de los futuros de los fondos de la Fed indicaba que el mercado cree que el banco central estadounidense reducirá los tipos de interés en 25 puntos base en su decisión del 17 de septiembre. Las apuestas también se inclinaban por rebajas en sus dos siguientes encuentros de octubre y diciembre.
El repliegue de la moneda ocurría en momentos en que el dólar recuperaba algo de terreno ante una cesta de divisas internacionales. Aun así, el peso mexicano apuntaba a culminar la semana con un retorno acumulado del 1.1%.
Bolsa mexicana se afianza cerca de su máximo histórico
La bolsa mexicana avanzaba el viernes, oscilando muy cerca de su récord máximo, impulsada por crecientes expectativas de que la Reserva Federal (Fed) comenzará a recortar los tipos de interés en su reunión de la próxima semana.
El índice accionario líder S&P/BMV IPC .MXX subía un 0.26% a 61,712.04 puntos, con un retorno semanal acumulado del 2%. El jueves, la bolsa alcanzó un nivel histórico de 61,886.12 unidades.
La política no es perfecta y tendrá costos, pero es mejor actuar que quedarse inmóvil, afirma Sergio Silva Castañeda de Economía, titular de la Unidad de Fomento y Crecimiento Económico.
Sergio Silva Castañeda, titular de la Unidad de Fomento y Crecimiento Económico de la Secretaría de Economía, no adorna el diagnóstico. Sabe que no hay tiempo que perder. “Estamos en medio de una transición global”, dice. No solo se trata de geopolítica o tecnología, también cambió la manera en que los gobiernos entienden su papel en la economía.
El regreso de Donald Trump aceleró ese viraje. “Estamos en otro escenario”.
Ese cambio es el telón de fondo de la iniciativa que sube aranceles de 10% a 50% a más de 1,463 fracciones de sectores como automotriz, textil, acero y electrónicos, con impacto directo a las importaciones chinas, principalmente. Para el titular de la Unidad de Fomento y Crecimiento Económico de la Secretaría de Economía, la decisión es pragmática: primero proteger, después ajustar.
La medida que se enmarca dentro del Plan México busca proteger a la industria frente a la competencia desleal, cuidar empleos, recaudar más recursos y fortalecer las cadenas productivas locales. Pero hay preocupaciones de que tenga efectos contrarios y dañe a empresas y consumidores.
Silva Castañeda reconoce que la política no es perfecta y que algunos sectores pueden resentir el golpe. Pero prefiere actuar a quedarse inmóvil. Consultar a 5 millones de empresas sería imposible, pero se harán correcciones si son necesarias.
“Entonces, hacemos consultas, desarrollamos la política y sí, luego tendremos un espacio para cambiar cuando lleguen, a las que no consultamos y nos digan, ‘¿Sabes qué? Esto es más problemático’. Pero si esperamos hacerlo con todas, entonces vamos a tener una política arancelaria por ahí de 2060. Es necesariamente imperfecto, pero hay mecanismos para ir ajustando”, comenta en entrevista con Expansión.
Silva Castañeda evita el discurso político y habla de claridad de reglas. Es consciente de que la relación con China sigue siendo un terreno incierto. “Lo único que les puedo prometer es transparencia”, dice, al explicar que el gobierno mexicano informará siempre a empresas y autoridades chinas qué medidas planea aplicar.
Pero lo cierto es que la relación futura dependerá también de las tensiones entre Beijing y Washington. La prioridad es cuidar la relación económica con Estados Unidos, de la que dependen la mayoría de los empleos formales en el país. Diversificar es deseable, pero no puede ignorarse que el mercado estadounidense es el más rentable para las exportaciones mexicanas.
Polos de desarrollo: el nuevo mapa industrial
Junto a los aranceles, el gobierno impulsa los Polos de Desarrollo para el Bienestar, un programa que busca detonar actividad en zonas que se quedaron al margen del crecimiento. No habrá dos polos iguales: cada uno se diseña a la medida de su región, con la participación de gobiernos estatales.
El objetivo es que los polos no sean enclaves aislados, sino motores de empleo y proveedores para las cadenas locales. En Ciudad Juárez el énfasis estará en semiconductores y electromovilidad; en Campeche, en diversificar una economía dependiente del petróleo; en la Riviera Maya, en sustituir importaciones del turismo con producción local.
Cuatro o cinco polos ya tienen obras en marcha y el resto avanza en su diseño administrativo. Los plazos son de largo alcance, porque llenar parques industriales llevará tiempo.
Pero las metas del Plan México son contundentes. La primera es insertar a México en cadenas tecnológicas de nueva generación. No pretende fabricar chips completos, pero sí convertirse en eslabón confiable en semiconductores y electromovilidad. La segunda es construir capacidades críticas que garanticen soberanía en momentos de crisis: medicamentos, dispositivos médicos, alimentos, energía. Y la tercera, la más inmediata, es cuidar industrias que sostienen miles de empleos, desde textiles hasta autopartes.
La política industrial, según Silva, no puede reducirse a perseguir lo glamuroso; debe equilibrar futuro y presente.
La medida afectará tanto a marcas chinas como a fabricantes globales que importan modelos desde ese país, como GM, Kia y Volvo.
El gobierno mexicano propuso elevar a 50% el arancel a la importación de autos ligeros provenientes de China, entre otros países con los que México no tiene tratado de libre comercio, un movimiento que busca proteger a la industria nacional y equilibrar la competencia frente al crecimiento acelerado de las marcas del gigante asiático.
La medida, incluida en el paquete de niveles arancelarios propuestos por la Secretaría de Economía, representa un salto respecto al arancel vigente, que oscila entre 15% y 20% para este segmento. Con ello, los automóviles se colocan entre los sectores más impactados, junto con vestido, textiles y productos de vidrio, que también enfrentarán incrementos a los niveles máximos permitidos por la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Las marcas chinas como BYD, Chirey, Changan, GWM y MG han acelerado su presencia en el país con estrategias de precios agresivas y una creciente red de distribuidores. El arancel de 50% podría encarecer sus vehículos, frenando la expansión que hasta ahora se había basado en la competitividad de costos frente a rivales establecidos.
El impacto no se limita a los fabricantes originarios de China. General Motors (GM), que destina cerca del 63% de sus ventas locales a modelos importados de ese país, sería uno de los principales afectados. La estrategia de la compañía ha dependido de aprovechar la producción en plantas chinas para abastecer al mercado mexicano con modelos de entrada y SUV compactas, segmentos altamente sensibles al precio.
Entre enero y agosto de este año, el fabricante de origen estadounidense importó 80,627 unidades del país asiático, principalmente de su marca Chevrolet, según datos de INEGI. Modelos como Aveo, Groove, Captiva, Spark EUV y Tornado Van provienen de China.
Impacto arancelario
La propuesta de la Secretaría de Economía es elevar el arancel actual de entre 15% y 20% hasta un 50%. Estas serían algunas de las marcas más afectadas si la medida es aprobada por el Congreso.
Otras armadoras también resentirían el cambio. Kia, Volvo, Ford y Stellantis importan al menos uno o dos modelos desde China, por lo que verían encarecidos ciertos vehículos de sus portafolios, aunque en menor proporción que GM. Para estas marcas, el reto será decidir si trasladan el aumento de costos al consumidor, reducen márgenes de ganancia o buscan alternativas de suministro en otros países.
De acuerdo con la propuesta oficial, los autos ligeros forman parte de los 17 sectores estratégicos en los que se plantean incrementos arancelarios. En total, se incluyen 1,463 fracciones arancelarias, con un arancel promedio que pasaría de 16.1% a 33.8%. En el caso de los vehículos, la nueva tasa es directamente la más alta permitida.
La iniciativa de arancel de 50% a autos importados de países con los que México no tiene acuerdos de libre comercio fue enviada al Congreso, por lo que aún debe someterse a votación. Durante este proceso legislativo, el proyecto podría sufrir ajustes o modificaciones antes de convertirse en ley, dependiendo de los debates y las propuestas de los legisladores y la iniciativa privada.
El Tesoro de Estados Unidos pidió la imposición de "aranceles significativos" a productos de China e India en un esfuerzo para detener sus compras de petróleo ruso.
El Tesoro de Estados Unidos pidió el viernes a los aliados del Grupo de los Siete y de la Unión Europea que impongan "aranceles significativos" a los productos de China e India para que detengan sus compras de petróleo ruso y convocó una reunión de finanzas del G7 para discutir los esfuerzos para intensificar la presión sobre Moscú para que ponga fin a su guerra en Ucrania.
"Las compras chinas e indias de petróleo ruso están financiando la maquinaria de guerra de Putin y prolongando la matanza sin sentido del pueblo ucraniano", dijo un portavoz del Tesoro de Estados Unidos en una declaración enviada por correo electrónico a Reuters.
"A principios de esta semana, dejamos claro a nuestros aliados de la UE que si se toman en serio poner fin a la guerra en su propio patio trasero, tienen que unirse a nosotros e imponer aranceles significativos que se rescindirán el día que termine la guerra".